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Todas ellas, vienen para enseñarte y hacer parte de tu proceso evolutivo
Según las heridas de tu infancia no resueltas, hacen que atraigas cierto tipo de parejas a tu vida. Y de como te comportas dentro de tu relación, según es la herida que se activa.
Estas heridas de la infancia son: El abandono, la traición y la humillación.
Pueden estar presentas todas, una o algunas de ellas.
Todo dependerá, del árbol genealógico en el que hayas decidido nacer. Y sobre todo que tanto trabajo hayas realizado a nivel emocional, para sanarlas.
¿Cómo te comportas, cuando se activa la herida de abandono y traición?
Esta herida está relacionada con el padre del sexo opuesto. Es decir: Si eres una mujer, la herida se habrá despertado debido a la relación que has tenido en tu infancia, con tu padre. Y si eres un hombre, será a la inversa, serán heridas que se han despertado, a partir de la relación que ha existido con tu madre.
De hecho, frente a la herida de abandono, la máscara que te colocas es la de DEPENDIENTE y tu gran miedo es LA SOLEDAD.
Mientras que frente a la herida de traición, la máscara que te colocas es la de CONTROLADOR y tu gran miedo es SEPARACIÓN.
Frente a una pareja, tendrás tendencia a:
Pensar que, para merecer amor, hay que complacer
Convertirte en lo que tu pareja, espera de ti
Generarás comportamientos reactivos: juicios, reproches, exigencias, celos, invasión y control
Crearás vínculos superficiales, cambiaras de pareja constantemente o que no te implicarás a fondo
Tendrás Idilios dramáticos y con codependencia
Experimentarás rechazo a la soledad, debido al tremendo malestar que te produce
Exigirás, culpabilizarás, manipularás o castigarás
Ejercer control constante sobre la pareja
Desarrollar métodos de forma constante, para tener todo supervisado
Ser muy desconfiado
¿Cómo te comportas, cuando se activa la herida de humillación?
Esta herida está relacionada con uno o los dos progenitores. La mascara que adoptas es la del MASOQUISTA y el miedo es la LIBERTAD.
Frente a una pareja, tendrás tendencia a:
Impresionar y ser especial, para conseguir atención y admiración
Conformarte con relaciones que no te nutren, ni te ayudan a crecer
Crear relaciones a distancia
Seducir y conquistar, para subir la auto estima
Sentirte inferior a tu pareja
No creerte con derecho a poner límites
Sientes inadecuado o fuera de lugar, la mayor parte del tiempo
Buscar relaciones, en las que te sientes por encima del otro
No apreciarte, escucharte o cuidar tu cuerpo
Sentirte con falta de seguridad, miedo a comunicar tus deseos
Incapacidad para mostrar tus habilidades o puntos fuertes
¿Porqué se te activan estas heridas en tu relación amorosa?
Teniendo en cuenta, que al principio, todos brindamos nuestra mejor versión a la otra parte. Aparecen para de alguna manera, poner a prueba la madurez de la relación. O sacar a flote, todo aquello que está pendiente de trabajar por ambas partes.
Porque si las heridas no se han integrado o han sido trabajadas a través de la sanación, de tu niño interior, se crean en la relaciones para actúen como espejos y puedas sanarlas..
Porque de alguna manera, tus parejas activan esas heridas, para que puedas verlas y sanarlas. No es casualidad que esas parejas, lleven el mismo nombre de quien te ha causado la herida en tu infancia. Tenga afinidad en su mes o día de nacimiento. O pueda ser tu “alma maestra” que ha venido a vivir un proceso de aprendizaje y sanación a tu lado.
Porque las parejas que llegan a tu vida, no lo hacen por azar, sino, que tanto ellas, como tú mismo, habéis pactado vivir ciertas experiencias, con el fin de ayudar a sanarte y a su vez, sanar tu árbol genealógico.
Porque es un proceso o pulso normal, dentro de una sana relación. Es así, que si existen, pueden aparecer rápidamente, es decir, durante el flirteo. O un poco mas adelante, pasados unos meses o el primer año de relación.
En una relación de pareja, que está en constante cambio, las heridas pueden aparecer algunos años mas tarde. Cuando tu cuerpo emocional las activa, debido a nuevas experiencias (la llegada de los hijos, una enfermedad, un impase económico, etc).
Como ves, no tener un niño interior sano, una herida de infancia medianamente sanada, te puede llevar a vivir experiencias amargas, en tus relaciones amorosas.
De ahí, que te invito a que te tomes algunos minutos, para analizar, como son o han sido tus relaciones de pareja.
Te preguntes, si ha llegado el momento de entrar en acción, trabajar y sanarte. Para que puedas estar preparado y en medio de la tormenta, seas capaz de discernir, quien es la persona correcta para que te acompañe en esta hermosa aventura que es la vida.
Compartido con amor
Andrea 🌸
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